Empate en Devoto

General Lamadrid 2- San Miguel- 2
Síntesis:
Estadio: Enrique Sexto
Horario: 15 hs
Fecha: 28 de Marzo del 2015
Público: 400 personas aproximadamente
General Lamadrid: Nahuel Valiñas, Julían Amado, Javier Peralta, Eric Herenspenger, Ángel Gauna, Eduardo Pérez, Gustavo Villalba, Leandro Arguello, Rodrigo Godoy, Eugenio Peralta Cabrera, Federico Diaz. DT: Roberto Romano.
San Miguel: Néstor Acosta, Ariel Kippes, Guillermo Báez, Ignacio Liporace, Patricio Bemabe, Guido Alonso, Franco Fiscella, Martín Aritto, Cristian Ortíz, Leonel García Barros, Luciano Pons. DT: Patricio Hernández.
Cambios:
San Miguel- Inzaurraga por Ortiz(lesionado), Palavecino por Bernabé, Matias Arce por Luciano Pons(lesionado).
Arbitro: Yael Falcón
Goles: 23´Javier Peralta (Lamadrid), 59´Luciano Pons (San Miguel-de penal), 68´ Luciano Pons (San Miguel), 77´Eric Herensperger(Lamadrid).
Figura: Luciano Pons- San Miguel.
Comentario:
Un justo empate
Ambiente de necesidad de sumar puntos había en Villa Devoto, precisamente en el estadio Enrique Sexto. Lamadrid necesitaba lograr una victoria de local, no lo hacía desde la primera fecha del campeonato. Lo mismo para el visitante en su condición, tenía que empezar a sumar puntos fuera de casa. Los dos equipos si o si precisaban los 3 puntos para no perderle pisada a los de arriba. El primero que insistió fue el conjunto de San Miguel, ya desde el arranque presionó al local para no dejarlo jugar con total tranquilidad. Lo inquietaba a través de centro a la cabeza de sus delanteros que no podían definir con precisión. A pesar de esto, el local sería el primero en abrir el marcador por medio de una jugada detenida, tras un centro de Arguello al área, la pelota logró conectar con la cabeza de Peralta Salinas que definió al segundo palo del arquero, dejándolo sin chanches para reaccionar. Fue el 1 a 0.
El visitante estaba jugando mejor pero no lograba inquietar al arquero de Lamadrid. Después del 1 a 0, el local pudo acomodarse mejor en la cancha y tuvo un par de ocasiones de gol pero sin precisión en los últimos metros. Hasta que en un avance de San Miguel, la defensa del Carcelero cometió falta adentro del área y el árbitro no dudo y cobró penal. Ya se terminaba el primer tiempo, inmejorable oportunidad de empatar para el conjunto visitante. Pero no fue así, el jugador Fiscella pateó el penal pero se le fue muy arriba del travesaño. El Trueno Verde se perdía una verdadera chance de emparejar el resultado. Así culminaba el primer tiempo, el visitante merecía más pero perdía por su falta de eficacia.
El complemento mostró a un San Miguel más enérgico, parecido a lo mostrado en inicio del partido, pero con mucho más énfasis y con la necesidad imperiosa de llevarse algún punto de Villa Devoto. Mientras que el local esperaba su oportunidad inteligentemente, también con la necesidad de ganar nuevamente en su estadio para ponerse bien arriba en la tabla de posiciones. Tuvo una clara el equipo visitante pero la gran intervención del arquero Valiñas, que tras un gran manotazo, evitó la caída de su arco, sino la pelota se colgaba en un ángulo. Igualmente eso no desanimo al conjunto de San Miguel que siguió insistiendo y tuvo su chance, nuevamente de penal. Esta vez lo logró aprovechar Luciano Pons, que definió sin ningún problema para lograr el empate. Pero el Trueno Verde quería a toda costa los tres puntos, por eso motivado por el resultado siguió avanzando en el área rival. De tanto insistir, hilvanó una jugada de gol, lo dejó una vez más a Luciano Pons de cara al gol, que quedo enfrente del arco y con mucha frialdad clavo la pelota en el segundo palo del arquero. Era la victoria para San Miguel.
Después de esto al local no le quedo más remedio, que barajar y dar de nuevo. Con mucha actitud fue a buscar dar vuelta el resultado. Con mucho empuje y garra, con lo que se suele llamar corazón, esa fibra intima que toca a los jugadores. Con todo eso Lamadrid empujó a su rival, hasta que en un centro, despejó la defensa de San Miguel, pero no fue suficiente porque le quedo a Herensperger, que pateó y no perdono. Era el 2 a 2.
Ya en los minutos finales, Lamadrid se contagio y quiso ir por más, tuvo dos oportunidades para ganar el partido pero no logró ser eficaz. Fue mucho mejor los últimos 20 minutos del complemento, pero no estuvo concentrado durante casi todo el transcurso del partido. Por todo esto fue que empataron dos equipos que tenían diferentes objetivos, el local quería si o si sumar en su casa, evitar perder para seguir arriba. Y el visitante necesitaba sumar en esa condición, para tener confianza para lo que se vendrá en el torneo. En definitiva, fue un justo empate por lo demostrado en el partido.
Nicolás Lovadina

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