Tanque completo

Defensores de Belgrano 2-Villa San Carlos 0


LA SINTESIS:


Estadio: Defensores de Belgrano


Horario: 17:05 horas


Fecha: 11 de junio de 2011


Publico: 5000 personas aproximadamente.


Defensores de Belgrano: Leonardo Griffo; Pablo Batallini, Leandro Martínez Montagnoli, Martín Alberich, Ivan Nadal; Luis González, Miguel Porcel, Santiago Sommariva, Jacobo Mansilla; Andrés Montenegro y Daniel Giménez.


Suplentes: German Oviedo, Nicolás Tarabini, Pedro Bocca, Fernando Cobian.


Cambios: 67m Albano Becica x Daniel Giménez, 74m Diego Coria x Andrés Montenegro, 77m Gustavo Arce x Miguel Porcel.


Villa San Carlos: Rodrigo Benítez; Mariano Fernández, Ezequiel Aguimcer, Emiliano Córdoba, Mauro Raverta; Gonzalo Raverta, Ignacio Oroná, Ezequiel Melillo, Nahuel Fernández Silva; Fernando Pasquale y Emanuel Sarati. DT: Ricardo Rezza.


Suplentes: Lucas Ochandorena, Jorge San Estaban, Cristian Noguera, Guido Barceló.


Cambios: ET Guillermo Stucky x Rodrigo Benítez, 53m Leandro Madrid x Fernando Pasquale, 67m Jonatan Linnias x Mauro Raverta.


Arbitro: Pablo Dovalo.


Líneas: Andrés Prendel y Ernesto Brusca.


Goles: 36m Daniel Giménez (de penal), 45m Daniel Giménez (DB)


Amonestados: Porcel, Mansilla, Nadal (DB); Aguimser, Sarati, Fernández Silva, Madrid (VSC)


La Figura: Daniel Giménez (DB)


Comentario:


Con una torrencial catarata de fútbol, así Defensores definió este pleito que a priori parecía complicado. Jugado con los dientes apretados, con todo el corazón y demostrando que es un grande de la categoría. Por su parte Villa San Carlos esta vez no tuvo esa voracidad que lo venía acompañando en los últimos encuentros y se rindió ante el local precozmente.


En la primera jugada de riesgo, el reemplazante del lesionado Volpe, Leandro Benítez duda en tomar con las manos una pelota en el área, cedida por Raverta y Mansilla llega tarde para empujarla mientras el arquero enmienda su error enviando la pelota al corner. Algunos minutos después avisaría Giménez, pero su remate pasó desviado. Por su parte San Carlos había perdido el mediocampo y los delanteros se encontraban aislados. La única llegada de la visita se produjo por intermedio de Sarati, pero su disparo paso lejos de la humanidad de Griffo que a esta altura era un mero espectador del primer acto. Cuando todos los caminos conducían a Benítez, llegó la apertura del marcador, Mansilla luchó una pelota en el área visitante y fue derribado por Aguimser, esto fue observado por Dovalo sancionando correctamente la falta. De la ejecución del penal se encargó Giménez, que con un disparo potente venció la estirada de Benítez. Ahí comenzó el principio del fin, porque los de Berisso con el tiempo y marcador en contra debían primero empatar el cotejo y luego ganarlo. Todo se terminó de derrumbar cuando Batallini armó una jugada increíble por derecha cediendo para el “tanque” Giménez que entrando en posición ofensiva y con una comba extraña introduce el balón en la portería, decretando el dos a cero, que a la postre sería el resultado final. Para colmo de males en esa jugada se lesiona el golero Benítez, debiendo ingresar Stucky. Así concluyó la primera parte, con el encuentro liquidado desde lo numérico, hasta lo emocional por parte de Defensores. El segundo periodo estuvo de mas, porque el local se recostó atrás esperando un contragolpe que nunca llego y Villa San Carlos en un estado de conmoción por el fútbol de alto vuelo desplegado por Defensores en el primer tiempo no atino a nada. Ni la entrada de Madrid solucionó el déficit en la creación, porque no fue socio para Fernández Silva que era contagiado por el ostracismo de sus compañeros. Cuando Dovalo marcó el final las gargantas de los hinchas de Defensores estallaron al unísono en un solo grito “Defensores quiere el Nacional” y sus jugadores quieren transformar este sueño en la gran realidad que anhelan todos en el Bajo Núñez.


Mariano de Luzuriaga

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