Polémica y golazo
FÉNIX 1: Santillán A(5); Bargas (6), Zúccaro (6), Bonora (5), Ciaccheri (5); Silva (6), Marcos (7), J.Ledesma A(5)(71´ M.Acosta); M.González (6)(63´ Maxi Dominguez); Riquelme (7)(85´ Rivero) y Fonzalida (5). DT: Santángelo. Supl: Mittelman, Valenzuela, Puch y Romero.
LUGANO 0: De Angelis (6); Ybarra (6), Olmos (6), Villanueva A(5), Vega A(4)(85´ Gianaschi); Prado (6), F.Ledesma (5), Ferrarío (6); Devecchi (5)(57´ D.Ramírez (6)); J.Sánchez (5) y Basualdo (5)(79´ Torales A). DT: Caggiano. Supl: Barragán, Santoli, Paulerena y Fiorentino.
Gol: 84´ Marcos (FEN). Cancha: Fénix (Buena). Arbitro: Diulio (3). Público: 400. Res.Moral: 0-0.
POLÉMICA Y GOLAZO
LA CLAVE: Primero la jugada que desató la polémica en Pilar, cuando se jugaba mas de media hora del complemento Juan Sánchez, uno de los puntas de Lugano se encaminaba a entrar al área intentando eludir a la “Tota” Santillán con un globo y recibió como respuesta la atajada con la mano fuera del área siendo este último hombre ya que el resto de la defensa había tirado el achique y se encontraban corriendo detrás de la pelota. El arbitro Diulio (que venía teniendo una actuación aceptable) sancionó el tiro libre indirecto como debía, pero solo amonestó al arquero local en lo que es un error garrafal ya que al ser último hombre y cortar una ocasión manifiesta de gol debió expulsar a Santillán.
Luego la visita descontrolado y a su vez algo desordenado debido a la sanción antes mencionada, salió jugando con displicencia desde atrás y se encontró con el “motorcito” del local, hablamos de Joaquín Marcos, quién robo la pelota en tres cuartos de cancha y comenzó a eludir rivales hasta enfrentarse a De Angelis al cual batió con un remate cruzado consiguiendo el inmerecido triunfo para los de Santángelo, ya que lo mas justo hubiese sido un empate.
QUE HICIERON: Fénix: La baja en el momento del precalentamiento de Dani González (le faltaban algunos estudios médicos que la AFA debía autorizárselos para poder jugar) resultó determinante para el circuito de juego que suele ofrecer el “Cuervo”. A pesar que su sustituto el ex Puerto Nuevo, “Coquito” González no desentonó aunque siempre sobresalió con jugadas individuales y no tanto en las colectivas.
No fue la tarde de su goleador (Fonzalida) quién desperdició varias ocasiones claras de gol (una en la segunda etapa se fue besando el travesaño empujado por el fuerte viento que azotó la zona de Pilar). Sin dudas fue de los partidos más flojos de Fénix en este campeonato, pero empujado por la habilidad y desfachatez que tiene Riquelme para jugar y sumado al tesón y corazón del “Enano” Marcos en cada pelota que disputa, pudo sacar adelante este duro partido que era para un empate clavado. De a poco se postula como un serio candidato a ser campeón amparado por los resultados y por las individualidades que tiene, que sino pueden juntarse hacer la diferencia por si solos.
Lugano: Sus postura desde el vamos fue esperar a su rival viendo que le proponía, aunque no es un equipo defensivo ya que juega con un enganche y dos puntas y trata de explotar las bandas con dos volantes bastante rápidos y técnicos como Prado y Ferrarío. Al ver que el local casi no lo inquietó en la primera mitad, para el complemento le comenzó de a poco a faltarle el respeto mediante el tándem por derecha de Ybarra y Prado pudo llevar algo de peligro al arco de Santillán. Aunque se descuidó un poco atrás y si no fuera por su capitán Olmos y su arquero De Angelis lo hubiera pagado caro. Ya cuando parecía que no habría goles, llegó la jugada polémica antes mencionada que terminó descontrolando a todo el equipo (inclusive suplentes y cuerpo técnico) y ya no fue el mismo equipo. Termina recibiendo el golazo de Marcos y ya el resto estuvo de más y el pitazo final lo deja con las manos vacías en un partido que al menos debió empatarlo.
EL PANTALLAZO
Soleada y ventosa tarde la que se vivió en Pilar en donde la banda del “Cuervo” con unos 80 representantes mostró un lindo colorido con 10 tirantes que flamearon como nunca debido al viento y al no estar demasiado ajustados, 1 cruzado, 10 banderas de palo que se lucieron bastante, también colgaron unos 10 trapos como: “Los pibes de siempre” y un trapo muy bonito combinado con los colores de Fénix y la lengua insignia de los Rolling Stones. Las canciones fueron acompañadas por varios redoblantes y un bombo que tenía pintado en el medio el escudo del club. Alentaron constantemente en el primer tiempo acordándose mucho de Luján y San Miguel. Ya en el complemento se fueron quedando empujados por el mal partido que se jugaba en el verde césped y por el fuerte sol que literalmente los estaba calcinando. Festejaron mucho junto con los 300 que hubo en platea la ridícula sanción del árbitro en la jugada polémica de la tarde y más todavía cuando el ídolo (Marcos) convirtió ese golazo cuando se moría el partido. Se rompieron las manos aplaudiendo en el final y en especial a la figura y goleador del partido. Se despidieron cantando el clásico: “Oh, vamos a volver…” De la visita unos 20 ubicados en el único sector donde da sombra.
Finalizado el partido en la zona de vestuarios hubo muchas quejas por parte de la gente de Lugano (en especial su técnico Caggiano) quiénes les recriminaban al árbitro que había cobrado ya que lo consideraban in entendible el fallo. Debido a eso Diulio le terminó reteniendo el carnet de entrenador a Caggiano y lo hizo sacar por la policía de su vestuario. Un alto dirigente del club visitante pidió a los periodistas presentes grito desaforado mediante que a este arbitro lo califiquen con “0” ya que si no en un par de años lo vamos a ver en primera.
Reportó: Andres Luzardo
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